El 2018 fue un año significativo en el ámbito del diseño, ya que se designó una ciudad como capital mundial del diseño. Este título, otorgado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), reconoce a una ciudad que destaca por su liderazgo en el desarrollo del diseño industrial, su compromiso con la innovación y su capacidad para impulsar el crecimiento económico a través del diseño. Este artículo explorará en profundidad qué significa ser capital mundial del diseño, quién fue la ciudad elegida en 2018 y cuáles fueron sus contribuciones al mundo del diseño.
¿Qué fue el capital mundial del diseño 2018?
En 2018, la ciudad elegida como Capital Mundial del Diseño fue Eindhoven, ubicada en los Países Bajos. Eindhoven no solo es conocida por su industria tecnológica y su histórica relación con la iluminación, sino también por su ecosistema de innovación y diseño. Fue seleccionada por su capacidad para integrar diseño, tecnología y creatividad en un entorno colaborativo que fomenta el desarrollo de soluciones sostenibles y funcionales.
Eindhoven aprovechó su designación para impulsar proyectos como el Design Impact Award, que premiaba soluciones de diseño con impacto social y ambiental. Además, organizó una serie de eventos internacionales, talleres y conferencias que reunieron a diseñadores, empresarios y académicos de todo el mundo. El objetivo era posicionar a Eindhoven como un referente global en diseño industrial y de experiencia.
Curiosidad histórica: Eindhoven tiene una historia rica en diseño industrial, remontándose al siglo XIX, cuando la compañía Philips, fundada allí, revolucionó el diseño de productos electrónicos. Esta tradición de innovación se mantiene viva en la actualidad a través de instituciones como la Design Academy Eindhoven, una de las escuelas de diseño más prestigiosas del mundo.
El impacto de ser capital mundial del diseño
Ser designado como Capital Mundial del Diseño no solo es un reconocimiento, sino también una oportunidad para impulsar el desarrollo económico, cultural y social de una ciudad. Eindhoven, al asumir este rol, pudo atraer inversión extranjera, fortalecer su industria creativa y promover la internacionalización de sus empresas. Además, el evento sirvió para sensibilizar a la población local sobre la importancia del diseño como herramienta de transformación social.
La colaboración entre el sector público, privado y académico fue clave para el éxito de la iniciativa. Empresas como Philips, ASML y otras firmas tecnológicas aprovecharon la designación para desarrollar nuevos productos, mientras que instituciones educativas ampliaron sus programas de investigación en diseño sostenible y experiencia del usuario. El impacto fue multidimensional: económica, cultural y social.
El legado de Eindhoven como Capital Mundial del Diseño 2018 sigue siendo visible en proyectos como el Strijp-Z, un antiguo complejo industrial convertido en un distrito de innovación y diseño. Este tipo de espacios refleja la capacidad de la ciudad para transformar su patrimonio industrial en una plataforma de creatividad y sostenibilidad.
El proceso de selección de la capital mundial del diseño
El proceso de designación de la Capital Mundial del Diseño es llevado a cabo por la OMPI, en colaboración con organizaciones internacionales y redes de diseño. Las ciudades interesadas deben presentar una propuesta detallada que incluya su visión estratégica, planes de acción y el apoyo institucional. La selección se basa en criterios como la calidad del ecosistema de diseño, el compromiso con la sostenibilidad, la capacidad de colaboración entre sectores y la visión de futuro.
En el caso de Eindhoven, su candidatura destacó por su enfoque en la innovación colaborativa y su compromiso con el diseño inclusivo. La ciudad mostró un plan a cinco años que incluía la creación de espacios de coworking, la organización de eventos internacionales y la promoción de startups de diseño. Además, demostró tener una infraestructura educativa sólida, con instituciones como la Design Academy Eindhoven, que ya era un referente global.
Ejemplos de impacto de Eindhoven como capital mundial del diseño
Durante su mandato como Capital Mundial del Diseño 2018, Eindhoven implementó una serie de iniciativas que tuvieron un impacto duradero. Algunos ejemplos destacados incluyen:
- Design Impact Award: Un concurso internacional que premiaba soluciones de diseño con impacto social y ambiental. En 2018, el ganador fue el proyecto Lumo, un dispositivo portátil que ayuda a personas con Parkinson a caminar con mayor estabilidad.
- Eindhoven Design Week: Un evento anual que se expandió durante el año 2018, atrayendo a diseñadores, arquitectos y empresas de todo el mundo. Durante esa edición, se celebraron más de 200 exposiciones, talleres y conferencias.
- Redesigning Eindhoven: Una iniciativa ciudadana que invitó a diseñadores a participar en la transformación de espacios públicos y edificios históricos, promoviendo la participación ciudadana en el diseño urbano.
El concepto de diseño como motor de innovación en Eindhoven
El diseño no es solo una disciplina estética, sino un motor de innovación que puede transformar industrias enteras. En Eindhoven, este concepto se puso en práctica a través de la colaboración entre diseñadores, ingenieros y empresarios. Por ejemplo, la empresa Philips utilizó el diseño como herramienta para desarrollar productos más sostenibles y accesibles, como la luz inteligente Hue, que permite a los usuarios personalizar su ambiente con solo tocar un botón.
Además, Eindhoven fomentó la creación de startups de diseño con apoyo financiero y mentoría. La incubadora Start-up Eindhoven se convirtió en un punto de encuentro para emprendedores que buscaban aplicar el diseño a problemas reales, desde la salud hasta la energía. Este enfoque de diseño centrado en el usuario ha ayudado a la ciudad a mantener su liderazgo en el sector tecnológico.
Recopilación de logros de Eindhoven como capital mundial del diseño
Algunos de los logros más destacados de Eindhoven durante su designación como Capital Mundial del Diseño 2018 incluyen:
- Aumento del turismo creativo: Eindhoven experimentó un aumento del 30% en visitas a espacios de diseño y museos durante el año 2018.
- Colaboraciones internacionales: La ciudad firmó alianzas con instituciones de diseño de otros países, como la Universidad de Stanford y la Escuela de Diseño de Helsinki.
- Creación de empleos en el sector del diseño: Se estimó que el evento generó alrededor de 1,500 empleos directos e indirectos en el sector creativo.
- Inversión extranjera: Empresas internacionales como Samsung y Siemens establecieron centros de innovación en Eindhoven durante el año 2018.
La importancia del diseño en la economía global
El diseño no solo influye en el desarrollo local, sino también en la economía global. En el contexto del capital mundial del diseño 2018, se destacó cómo el diseño puede impulsar la competitividad de las empresas y la sostenibilidad del desarrollo. Por ejemplo, el diseño centrado en el usuario ha permitido a las empresas crear productos más eficientes, accesibles y atractivos, lo que mejora la experiencia del consumidor y aumenta las ventas.
Además, el diseño industrial contribuye al desarrollo de soluciones innovadoras en sectores clave como la salud, la energía y el transporte. En Eindhoven, se promovió el diseño como una herramienta para abordar desafíos globales, como el cambio climático y la desigualdad social. La ciudad mostró cómo el diseño puede ser una fuerza transformadora, no solo en el ámbito económico, sino también en el social y ambiental.
¿Para qué sirve el capital mundial del diseño?
El título de Capital Mundial del Diseño sirve como un catalizador para impulsar el desarrollo económico, cultural y social de una ciudad. Al ser reconocida como capital, una ciudad gana visibilidad a nivel internacional, lo que atrae inversión, turismo y colaboraciones con otras ciudades y organizaciones. Además, el evento permite a la ciudad mostrar su talento, recursos y visión estratégica, fortaleciendo su identidad como un lugar de innovación.
Por ejemplo, Eindhoven utilizó su designación para posicionar a la región como un destino para diseñadores, emprendedores y estudiantes. El diseño también se convirtió en un puente para conectar a diferentes sectores, como la tecnología, la educación y el gobierno, fomentando una cultura de colaboración e innovación. En última instancia, el capital mundial del diseño no solo beneficia a la ciudad elegida, sino también al mundo entero, al compartir buenas prácticas y modelos de desarrollo sostenible.
Otras ciudades que han sido capitales mundiales del diseño
Antes de Eindhoven, otras ciudades han tenido el honor de ser designadas como Capital Mundial del Diseño. Algunas de las más destacadas incluyen:
- Tokio (2016): Conocida por su cultura del diseño japonés y su enfoque en la precisión y la elegancia.
- Rotterdam (2014): Destacada por su arquitectura innovadora y su enfoque en el diseño urbano.
- São Paulo (2012): Representó el crecimiento del diseño en América Latina y promovió el diseño como herramienta para el desarrollo social.
Cada ciudad ha dejado un legado único, mostrando cómo el diseño puede adaptarse a diferentes contextos culturales y económicos. Estas experiencias han sido compartidas a nivel global, inspirando a otras ciudades a seguir caminos similares.
El papel del diseño en la sostenibilidad
El diseño tiene un papel crucial en la sostenibilidad, ya que permite crear productos y servicios que reduzcan el impacto ambiental. Durante su mandato como Capital Mundial del Diseño, Eindhoven promovió el diseño sostenible como una prioridad. Por ejemplo, se celebraron talleres sobre materiales reciclables, diseño de productos con vida útil prolongada y la economía circular.
El diseño también es una herramienta para abordar problemas sociales, como la exclusión digital o el acceso a la salud. En Eindhoven, se desarrollaron proyectos que utilizaban el diseño para mejorar la calidad de vida de personas mayores o personas con discapacidad. Estos esfuerzos reflejaron el compromiso de la ciudad con un diseño inclusivo y sostenible.
El significado del capital mundial del diseño
El título de Capital Mundial del Diseño no es solo un honor, sino también una responsabilidad. Representa el reconocimiento de una ciudad como un referente global en el diseño industrial, el diseño de experiencia y el diseño sostenible. Este título implica que la ciudad debe liderar iniciativas que impulsen la innovación, la educación y la colaboración entre sectores.
Además, el capital mundial del diseño refleja una visión estratégica a largo plazo. No es un evento puntual, sino una oportunidad para construir una cultura de diseño que perdure en el tiempo. En Eindhoven, se crearon estructuras permanentes, como redes de colaboración entre empresas y universidades, que siguen operando años después de la designación.
¿Cuál es el origen del concepto de capital mundial del diseño?
El concepto de Capital Mundial del Diseño fue introducido por la OMPI en colaboración con la Federación Internacional de Asociaciones de Diseño Industrial (ICSID, hoy World Design Organization) en 2012. La idea surgió como una forma de reconocer y apoyar a ciudades que estaban liderando la innovación a través del diseño.
El primer capital mundial del diseño fue Rotterdam, en 2012, seguido de São Paulo en 2012, Tokio en 2016 y Eindhoven en 2018. Cada ciudad elegida debe cumplir con criterios estrictos de calidad en su ecosistema de diseño y mostrar un compromiso con el desarrollo sostenible y la internacionalización. El objetivo del programa es promover el diseño como un motor de desarrollo económico y social a nivel global.
Otras formas de reconocer el liderazgo en diseño
Además del título de Capital Mundial del Diseño, existen otras formas de reconocer el liderazgo en diseño. Por ejemplo, hay premios internacionales como el Design Excellence Award o el Red Dot Award, que destacan proyectos de diseño sobresalientes. También hay instituciones como el Design Museum de Londres o el Museo de Diseño de Eindhoven, que celebran el trabajo de diseñadores de todo el mundo.
Además, hay redes de ciudades que colaboran en proyectos de diseño, como Design Cities, que busca fomentar el intercambio de conocimientos y buenas prácticas entre capitales del diseño. Estas iniciativas reflejan la creciente importancia del diseño en el desarrollo urbano, la innovación y la sostenibilidad.
¿Por qué es importante el diseño en la sociedad moderna?
En la sociedad moderna, el diseño no solo influye en la estética, sino que también impacta en cómo vivimos, trabajamos y nos comunicamos. El diseño industrial, el diseño de experiencia y el diseño de servicios son herramientas clave para resolver problemas complejos, como la falta de acceso a la salud, la energía sostenible o la movilidad urbana. En Eindhoven, el diseño se utilizó como un puente para conectar a diferentes sectores y crear soluciones innovadoras.
Además, el diseño fomenta la creatividad y la innovación, habilidades esenciales en un mundo en constante cambio. A través del diseño, las personas pueden expresar su identidad, mejorar su calidad de vida y participar en el desarrollo de su comunidad. Por eso, el diseño no es solo una disciplina profesional, sino también un derecho social y un motor de transformación.
Cómo usar la palabra capital mundial del diseño y ejemplos de uso
La expresión capital mundial del diseño se puede utilizar en diversos contextos, como:
- Contexto académico: La Universidad de Eindhoven se benefició significativamente de la designación de la ciudad como capital mundial del diseño 2018.
- Contexto empresarial: Gracias a que Eindhoven era la capital mundial del diseño, varias empresas tecnológicas decidieron establecerse allí.
- Contexto periodístico: El evento celebrado en Eindhoven durante el año 2018, cuando fue designada como capital mundial del diseño, atrajo a diseñadores de todo el mundo.
Además, la expresión también se puede usar en redes sociales, blogs, guías turísticas y publicaciones científicas. Es una forma efectiva de destacar la relevancia de una ciudad en el ámbito del diseño y su contribución al desarrollo sostenible e innovador.
El legado de Eindhoven como capital mundial del diseño
El legado de Eindhoven como Capital Mundial del Diseño 2018 es duradero y multifacético. La ciudad no solo ganó visibilidad internacional, sino que también construyó una infraestructura sólida para continuar liderando en diseño. Espacios como el Strijp-Z y la Design Academy Eindhoven siguen siendo centros de innovación y colaboración. Además, la red de contactos y alianzas internacionales establecidas durante ese año continúan fortaleciendo la posición de Eindhoven como un referente global.
El enfoque en el diseño sostenible y el diseño centrado en el usuario también sigue siendo una prioridad para la ciudad. Empresas locales y startups han adoptado estos principios, creando productos y servicios que resuelven problemas reales y mejoran la calidad de vida. El legado de Eindhoven es un ejemplo de cómo el diseño puede transformar una ciudad, no solo en el aspecto estético, sino también en el económico y social.
El futuro del diseño en Eindhoven y otras ciudades
El futuro del diseño en Eindhoven parece prometedor, con un enfoque cada vez más sostenible e inclusivo. La ciudad continúa invirtiendo en educación, infraestructura y colaboración internacional para mantener su liderazgo en el sector. Además, otras ciudades también están adoptando estrategias similares, buscando destacar en el ámbito del diseño y aprovechar su potencial como motor de innovación.
En el futuro, se espera que más ciudades compitan por el título de Capital Mundial del Diseño, lo que impulsará una mayor conciencia sobre el papel del diseño en la sociedad. Además, se espera que el diseño se integre aún más en políticas públicas, educación y economía, convirtiéndose en una herramienta clave para el desarrollo sostenible y la equidad social.
Ana Lucía es una creadora de recetas y aficionada a la gastronomía. Explora la cocina casera de diversas culturas y comparte consejos prácticos de nutrición y técnicas culinarias para el día a día.
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